En la avalancha de sondas que llegó a Marte en 2020 se coló una misión de bajo perfil de Emiratos Árabes Unidos (EAU). Esta nave, debido a su misión principal de estudiar la atmósfera, tiene una órbita muy elevada. Gracias a ella también puede estudiar en ocasiones una de las lunas de Marte, Deimos.
Pese a que su dueño sea la Agencia Espacial de EAU, su diseño, fabricación y lanzamiento recayeron en otros países. De hecho, se usa el hecho de la existencia de un centro de control en la universidad de Arizona para criticar la misión. Este hecho es extraordinariamente anómalo, pero también se apunta a que es dinero invertido en I+D lo que siempre es positivo.
Deimos es una luna de Marte, más pequeña que su hermana Fobos, también órbita a mayor altitud. Tarda treinta horas en dar una vuelta, mientras que la mayor solo tarda siete.
Ambas son bastante desconocidas, más allá de su forma irregular, que ha dado pie a teorías sobre si se trataría de asteroides capturados. Pero los últimos datos obtenidos por Al Amal sobre Deimos apuntan a que vendría del propio Marte.
Un dato curioso es que en unos cincuenta millones de años, Deimos será la única luna de Marte. Fobos orbita extremadamente cerca del planeta, además, las fuerzas de marea arrastran la luna hacia él. Su tasa de descenso es muy limitada, unos dos metros al año, pero en millones de años, su descenso es muy grande.
Cuando supere el llamado límite de Roch podría bien romperse o bien estrellarse contra el planeta.
Esta entrada fue modificada por última vez en 03/04/2024 14:09