«Wd 1 es, sin duda, uno de los objetos más interesantes de nuestra Galaxia –señala Ignacio Negueruela, catedrático de la Universidad de Alicante que encabeza estudio–. Debido a la enorme cantidad de polvo a lo largo de nuestra línea de visión, incluso un telescopio tan avanzado como Gaia tiene dificultad para darnos datos de alta calidad. Ha sido necesario aplicar un complejo tratamiento estadístico a las observaciones para poder dar un valor tan preciso de la distancia. Pero Gaia nos ha proporcionado mucha más información, ya que nos ha revelado el auténtico tamaño del cúmulo y nos ha permitido identificar estrellas en él que no se conocían».
Emilio J. Alfaro, investigador del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC) y coautor del artículo, enfatiza la importancia de los datos de Gaia para seleccionar las estrellas que pertenecen al cúmulo y determinar su distancia precisa. “El cúmulo se encuentra a unos trece mil años luz del Sol, lo que implica que su masa está más próxima a las cien mil masas solares que a unas pocas decenas de miles, señalándolo como el cúmulo estelar joven más masivo del Grupo Local, si exceptuamos a R136 en la Nube Grande de Magallanes”.