La luna de Júpiter, Ío, conocida por ser el cuerpo celeste más volcánico del Sistema Solar, ha protagonizado un hallazgo sin precedentes. Científicos de la misión Juno de la NASA han detectado un colosal punto caliente en su hemisferio sur. Este gigantesco sitio volcánico emite erupciones con una potencia seis veces mayor que la energía total generada por todas las plantas de energía de la Tierra.
El descubrimiento fue posible gracias al Jovian Infrared Auroral Mapper (JIRAM), un instrumento proporcionado por la Agencia Espacial Italiana.
Flybys cercanos: datos que sorprenden
Scott Bolton, investigador principal de la misión en el Southwest Research Institute, afirmó: “Juno tuvo dos sobrevuelos realmente cercanos de Ío durante su misión extendida. Los datos obtenidos en el último superaron nuestras expectativas. Este es el evento volcánico más potente registrado en el mundo más volcánico de nuestro sistema solar”.
El fenómeno observado se debe en gran parte a la influencia gravitacional de Júpiter. Ío, de un tamaño similar al de la luna terrestre, orbita a corta distancia del gigante gaseoso. Su órbita elíptica provoca un tira y afloja gravitacional constante, lo que genera fricción interna y calor suficiente para derretir su interior. Como resultado, Ío alberga alrededor de 400 volcanes activos.
Alessandro Mura, coinvestigador de la misión en el Instituto Nacional de Astrofísica en Roma, explicó: “JIRAM detectó un evento de radiación infrarroja extrema: un gigantesco punto caliente en el hemisferio sur de Ío que saturó nuestros detectores. Las evidencias sugieren que se trata de varios puntos calientes estrechamente ubicados, probablemente conectados a un vasto sistema de cámaras magmáticas subterráneas”.
El equipo científico estima que el nuevo punto caliente abarca aproximadamente 100 000 kilómetros cuadrados, superando al anterior récord establecido por el lago de lava Loki Patera, que tiene aproximadamente 20 000. La potencia radiada medida superó los 80 billones de vatios.
Imagen visual de un fenómeno colosal
El punto caliente también fue capturado por la cámara de luz visible JunoCam. Al comparar las imágenes de sobrevuelos anteriores con las tomadas el 27 de diciembre de 2024, se observaron cambios claros en la coloración de la superficie alrededor de este. Estos cambios suelen estar asociados con erupciones volcánicas y la formación de nuevos depósitos de roca y azufre.
Las erupciones de esta magnitud pueden dejar firmas persistentes, como depósitos piroclásticos (fragmentos de roca expulsados por un volcán), pequeños flujos de lava y depósitos ricos en azufre.
La próxima oportunidad para observar este fenómeno será durante un sobrevuelo del 3 de marzo de 2025, cuando Juno buscará cambios en el paisaje alrededor del punto en cuestión.