«Los microbios eran muy similares a los que se encuentran en respiraderos hidrotermales, fuentes termales como Yellowstone y otros sistemas volcánicos. Nuestra mejor suposición es que los microbios procedían de ese tipo de fuentes».
Desaparición inesperada
Respecto a la desaparición de la isla, los investigadores no contaban con el suceso. De hecho, según relatan, habían planeado una semana antes de la erupción un nuevo viaje de regreso para seguir investigando.
«Por supuesto, nos decepciona que la isla haya desaparecido, pero ahora tenemos muchas predicciones sobre lo que ocurre cuando se forman islas», aseguró Dragone. «Si volviera a formarse algo, nos encantaría ir allí y recoger más datos. Tendríamos un plan de juego sobre cómo estudiarla», concluyó.
Fuente: DW/Felipe Espinosa