Tim Samuel, un fotógrafo, se sumergió en el mar en las aguas de la Bahía de Byron, Nueva Gales del Sur, Australia, para fotografiar tortugas marinas. Pero el destino quiso que Tim se encontrara ese día con un evento extraordinario y una oportunidad única para fotografiar.
Un pez atrapado dentro de una medusa le llamó la atención y no dudó en disparar el objetivo. «Estaba atrapado dentro pero desde allí controlaba los movimientos de la medusa», escribió Tim en su relato de Instagram. Compartió la primera fotografía en diciembre, pero no ha sido hasta ahora que ha comenzado a viralizar en las redes sociales, gracias a la popular cuenta de DiscoverOcean que la descubrió y la difundió.
La instantánea no sólo ha captado la atención de los usuarios de Internet. La preocupación y la curiosidad por el destino de los peces se han apoderado de los comentarios. Para responder a esta preocupación, Australian Geographic entrevistó al biólogo del Centro de Ciencias Marinas de la Universidad de Queensland, Ian Tibbetts, quien dijo que podría tratarse de un jurel alevín que buscaba un refugio bajo la medusa.
«Es difícil decir si es feliz o no de estar allí», dijo Tibbetts. «Mi suposición es que probablemente esté muy contento de estar protegido de las amenazas externas», concluyó.