Uno tras otro, los insectos voltean momentáneamente su abdomen hacia arriba, creando un impresionante efecto de ondulación.
Esta fascinante táctica, tan desconcertante como espectacular, es uno de los distintos mecanismos que utilizan las abejas para ahuyentar a los depredadores de los insectos, como los avispones. Una tras otra, y en perfecta coordinación, las abejas voltean momentáneamente su abdomen hacia arriba, creando un impresionante efecto de ondulación a través de toda la colmena. En el vídeo se puede ver cómo todos los insectos empiezan a moverse y a hacer vibrar sus cuerpos de forma gradual.