China revela nuevas fotografías desde la superficie de la cara oculta de la Luna
El rover chino Yutu-2, que desde 2019 explora la cara oculta de la Luna, ha proporcionado nuevas imágenes de su entorno. Las fotografías fueron capturadas por la cámara panorámica del mástil del rover y muestran un paisaje repleto de cráteres y rastros de su propio recorrido. Con un desplazamiento de 1630 metros hasta la fecha, el vehículo ha superado ampliamente su vida útil estimada de solo tres meses.
玉兔二号新照片，由月球车桅杆全景相机的左相机 56 张环拍后裁剪。拍摄日期是 2024-12-06（探测器第 74 月昼），拍摄时玉兔二号位于月球背面的南纬 45.423860° 东经 177.563171°。
— SegerYU (@SegerYU) March 3, 2025
在这里月球车的累计行驶里程大约是 1 630 m。月球车在最近每个月昼平均移动大约 5 m。
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Un entorno hostil y desafiante
El lado oculto de la Luna presenta condiciones extremas que desafían la durabilidad del rover. A diferencia de la Tierra, donde el ciclo de día y noche dura 24 horas, en la Luna este proceso se extiende a 30 días. Yutu-2 debe soportar temperaturas extremas, alternando entre frío gélido y calor abrasador debido a la ausencia de atmósfera. Para sobrevivir a las noches lunares, el rover cuenta con una unidad calentadora por radioisótopos de uranio, un elemento clave para su longevidad.
La evidencia fotográfica y las dudas sobre su estado
Las recientes imágenes revelan un paisaje lunar accidentado, con cráteres de diferentes tamaños y huellas del propio rover marcando su trayecto. Sin embargo, un detalle inquietante ha llamado la atención: según datos de la NASA, el Yutu-2 ha permanecido inmóvil desde marzo de 2024. Este hallazgo ha generado interrogantes sobre el estado real de la misión, pues China no ha informado sobre una falla en el sistema de movilidad del rover.
El precedente del rover Zhurong y el hermetismo chino
China tiene un historial de éxitos espaciales, pero también de silencio ante posibles fracasos. Un caso similar ocurrió con el rover marciano Zhurong, del que no se ha recibido información oficial desde hace más de dos años. Imágenes satelitales han revelado que Zhurong permanece inmóvil y cubierto de polvo, lo que sugiere que sus paneles solares quedaron obstruidos, impidiéndole generar energía suficiente para operar.
A pesar de las dudas sobre su operatividad, Yutu-2 ha batido récords de actividad en la Luna y ha demostrado la capacidad tecnológica china en la exploración espacial. Su misión ha servido para probar tecnologías que serán cruciales en futuras exploraciones, incluidas las ambiciones chinas de llevar misiones tripuladas a la Luna en los próximos años.