Nuevo rover: la NASA ya tiene su vehículo para volver a rodar por la Luna

La NASA ha seleccionado a Intuitive Machines, Lunar Outpost y Venturi Astrolab para desarrollar un vehículo todoterreno lunar (LTV, por sus siglas en inglés) que los astronautas de Artemis utilizarán para desplazarse por su superficie, realizando investigaciones científicas durante la campaña Artemis y preparándose para misiones humanas a Marte.

Crédito: intuitivemachines.com

Objetivo: Artemis 5

Las adjudicaciones aprovechan la experiencia de la NASA en el desarrollo y operación de rovers para construir capacidades comerciales que apoyen el descubrimiento científico y la exploración humana a largo plazo en la Luna. La NASA tiene la intención de comenzar a utilizar el LTV para operaciones tripuladas durante Artemis V.

Esperamos con interés el desarrollo del vehículo de exploración lunar de la generación Artemis para ayudarnos a avanzar en lo que aprendemos en la Luna.

Este vehículo aumentará considerablemente la capacidad de nuestros astronautas para explorar y realizar investigaciones en la superficie lunar, sirviendo también como plataforma científica entre misiones tripuladas.

– Vanessa Wyche, directora del Centro Espacial Johnson de la NASA en Houston.

Crédito: intuitivemachines.com

La NASA adquirirá el LTV como un servicio de la industria. El contrato está basado en hitos con órdenes de trabajo de precio fijo y tiene un valor máximo potencial combinado de $4.6 mil millones para todos los premios.

Cada proveedor comenzará con una orden de trabajo de viabilidad, que será un estudio especial de un año para desarrollar un sistema que cumpla con los requisitos de la NASA a través de la fase preliminar del proyecto de madurez del diseño. La agencia emitirá una solicitud posterior de propuesta de orden de trabajo a los proveedores elegibles para una misión de demostración para continuar desarrollando el LTV, entregarlo a la superficie de la Luna y validar su desempeño y seguridad antes de Artemis 5. 

Crédito: intuitivemachines.com

El LTV podrá manejar las condiciones extremas del polo sur de la Luna y contará con tecnologías avanzadas para la gestión de energía, la conducción autónoma y sistemas de comunicación y navegación de última generación. Las tripulaciones utilizarán el LTV para explorar, transportar equipo científico y recolectar muestras de la superficie lunar, mucho más lejos de lo que podrían hacerlo a pie, permitiendo un mayor rendimiento científico.

Entre las misiones Artemis, cuando las tripulaciones no estén en la Luna, el LTV operará de forma remota para apoyar los objetivos científicos de la NASA según sea necesario. Fuera de esos tiempos, el proveedor tendrá la capacidad de utilizar su LTV para actividades comerciales de la superficie lunar no relacionadas con las misiones de la NASA.