Aogashima pertenece a Japón y se ubica en el Mar de Filipinas, en el archipiélago Izu. Es una isla tropical exótica considerada uno de los lugares más singulares de la Tierra, teniendo en cuenta que está en medio de aguas saladas sin carreteras, conexiones, y con menos de 200 residentes.
Una de las razones por la que se ha hecho a conocer, es porque se formó en el cráter de un volcán. Al ser un espacio inhóspito se formó vegetación y con ella mucha flora, frutas y un ambiente habitable, perfecto para familias que quisieran disfrutar de desconexión.
Otra de las razones por la que la isla Aogashima es especial, es porque solo puede llegarse a ella por barco o helicóptero, considerando que no tiene vías, carreteras, ni mucho menos aeropuerto.