Este fenómeno natural conocido como el Fuego de San Telmo fue observado en la antigüedad y recibió su nombre en la Edad Media por parte de los marineros españoles. Sin embargo, incluso hoy en día es un efecto que rara vez se logra captar en vídeo.
Se trata de un plasma generado por una gran diferencia de potencial eléctrico en la atmósfera, que supera el valor de ruptura dieléctrica del aire. Originalmente, este fenómeno, que puede adoptar distintas formas en función de las circunstancias, se observaba en los mástiles de los barcos.