La sonda china Chang’e 6 despega por segunda vez. Lanzada originalmente el pasado 3 de mayo, el módulo de ascenso encendió sus motores y desde la superficie voló hasta llegar a órbita lunar. A pesar del aparente silencio por parte de China, fueron liberadas varias fotografías y videos de la estadía de la sonda en la Luna. Esta misión hace parte de un programa que busca sentar las bases para futuros vuelos tripulados y asentamientos permanentes.
La diosa en la Luna
La sonda Chang’e 6, nombrada en honor a la diosa del mismo nombre de la mitología china, es la primera misión en la historia destinada a recolectar, almacenar y traer a la Tierra muestras de regolito del lado oculto de la Luna. Esta región supone un gran interés científico para desvelar los misterios y la historia del satélite natural, sin embargo, debido al desafío de conectividad en la zona ha sido ignorada por las diferentes agencias espaciales.
Chang’e 6 despegó el 3 de mayo y logró aterrizar con éxito el 1 de junio a las 22:23 UTC. Es no solo la segunda vez que China logra llevar una sonda al lado oculto de la Luna, sino que mantiene una racha impecable de aterrizajes por parte de la CNSA.
La mayor parte de la misión ha ocurrido en un profundo silencio con esporádicas actualizaciones sin mayor detalle. La hora de aterrizaje fue anunciada cerca de 20 minutos después de haber ocurrido y durante dos días, además del video del descenso, no hubo mayor contenido o noticias al respecto. Una vez el módulo de ascenso despegó y entró en órbita lunar, China liberó varias fotografías, videos e información sobre la estadía en la superficie.
Es importante destacar que, debido a la imposibilidad de establecer una conexión directa con la Tierra, Chang’e 6 depende del satélite de retransmisión Queqiao-2. El cual se encuentra en una órbita elíptica lunar y sirve como puente entre la sonda y estaciones terrestres.
Excavación lunar
Chang’e 6 duró 48 horas y 15 minutos en la superficie lunar, tiempo el cual aprovechó al máximo para recolectar muestras, activar experimentos y capturar hermosas panorámicas del entorno. Las primeras reveladas fueron las del aterrizaje, un par de fotogramas fueron procesados en mejor calidad y con una mejor aproximación a colores reales.
Así mismo, hay fotografías tomadas una vez desde la superficie, enfocadas en su mayoría a mostrar el proceso de recolección, transporte y almacenamiento de muestras de regolito lunar. Siendo este el enfoque principal de la misión. Esta actividad se realizó a lo largo de las 48 horas y fue posible obtener un video que muestra cada paso. Estas actividades empezaron a pocos minutos de confirmar el éxito del aterrizaje.
Fueron tomadas también otras panorámicas desde la sonda que muestran la región final de aterrizaje, alejada por varios kilómetros del lugar designado originalmente. En estas se evidencia como Chang’e 6 está en una zona plana, tal que en el horizonte no se aprecian casi montañas.
Ignición
Al igual que su predecesora Chang’e 5, Chang’e 6 lleva una bandera china que quedaría izada en la superficie lunar durante décadas intacta. Una cámara a bordo estaba especialmente destinada a fotografiarla.
Una clara diferencia entre ambas es que en este caso contaba con una extraña carga. Chang’e 6 llevaba consigo un inesperado rover lunar, el cual capturó una impresionante imagen de la sonda. Este fue desplegado el último día y logró desplazarse a unos pocos metros.
Una vez almacenadas y aseguradas las muestras, el módulo de aterrizaje activó su motor con un empuje de 3000 N para despegar y entrar en órbita. A lo largo de dos días realizará actividades de rendezvous y acoplamiento para transferir la carga al módulo orbital, mismo que se encargará de llevar el regolito a la Tierra, cuya fecha de llegada es el 25 de junio.
[📸Chang’e-6 ascending] Chang'e 6 has completed the lunar ascent phase, the next step is lunar orbit rendezvous docking and sample transfer! Full HD:https://t.co/Gu4CvHUn5ypic.twitter.com/a313lXoUHJ
Además, en una de las animaciones del despegue se muestra un último objeto eyectado desde el módulo de ascenso. A falta de confirmación oficial se presume es una cámara.
Cabe aclarar que no se observa gases expulsados del módulo de ascenso por la propia naturaleza del gas en el vacío. A diferencia de la Tierra, el combustible no quemado no tiene oxígeno para reaccionar y la nula presión externa permite a la pluma expandirse a gran velocidad, perdiendo densidad y disminuyendo la intensidad del brillo.