Inusual fenómeno atmosférico nos permite ver detalles ocultos del Sol: no lo intentes sin filtros, es peligroso

El 26 de agosto de 2025, la calima cubrió el cielo del sureste de España con un velo anaranjado y espeso. Lo que para muchos fue una jornada de aire pesado y visibilidad reducida, para la observación y la fotografía se convirtió en una oportunidad singular: capturar el Sol como pocas veces se deja ver, con su disco claramente definido y las manchas solares visibles a simple vista.

El disco solar enrojecido por la calima del Sáhara. Se aprecian varias manchas solares activas, incluidas AR 4197 y AR 4199. Créditos: AstroAventura

Qué es la calima y de dónde procede

La calima es un fenómeno atmosférico provocado por la suspensión de diminutas partículas de polvo en la atmósfera. En España procede del Sáhara, arrastrada por las corrientes de aire hacia la península y otras zonas del Mediterráneo.

Cuando la calima llega, el aire adquiere un tono turbio, la visibilidad se reduce y el cielo se tiñe de colores ocres o anaranjados, especialmente al amanecer y al atardecer. Estas partículas dispersan y atenúan la radiación solar, actuando como un filtro natural que modifica la luz que percibimos desde la superficie.

El sol anaranjado entre la calima del Sáhara, con varias manchas solares bien definidas en su superficie. Créditos: AstroAventura

La calima como filtro natural

En esta ocasión no se empleó ningún filtro óptico adicional. La observación se realizó de manera profesional y con todas las precauciones: nunca se miró directamente al astro rey, ya que hacerlo sin filtros homologados es extremadamente peligroso para la vista.

La cámara, en cambio, sí fue apuntada directamente al Sol sin filtros. Esto fue posible porque la calima redujo notablemente el brillo solar, actuando como un filtro natural. Con el diafragma cerrado y velocidades de obturación muy rápidas, el sensor pudo registrar el disco solar sin quedar dañado y sin que la imagen resultara sobreexpuesta.

Este efecto atenuador de la calima permitió capturar detalles como las manchas solares, algo que en condiciones normales requeriría filtros específicos para fotografía solar.

El sol y sus manchas activas

Lo más llamativo de las imágenes fue el color rojizo del sol y la presencia de manchas en nuestra estrella. Estas zonas más oscuras corresponden a áreas de intensa actividad magnética y temperaturas algo inferiores al resto de la superficie solar. El 26 de agosto de 2025 se distinguían tres grupos principales: la región AR 4191, situada en el noroeste del disco y de aspecto grande pero estable; la AR 4197, en el sudeste, muy activa y responsable de varias erupciones de clase M; y la AR 4199, en el sur, con actividad moderada y también generadora de llamaradas M. 

El sol velado por la calima del Sáhara, con manchas solares destacando en su superficie. Créditos: AstroAventura

La experiencia descrita debe entenderse como un ejercicio profesional y seguro, realizado con pleno conocimiento de los riesgos. Observar o fotografiar el sol sin filtros adecuados puede dañar irreversiblemente la vista o el sensor de una cámara. Incluso con calima, nunca se recomienda mirar directamente al Sol. Para observaciones más prolongadas o en condiciones de cielo despejado, los filtros solares homologados son imprescindibles.

astroaventura

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