Una regla para medir el universo
Las lentes gravitacionales no son nada nuevo, pero esta en específico tiene una gran peculiaridad. Además de la galaxia amplificada se puede observar una supernova de tipo 1a. Las cuales son un tipo especial de fenómenos que suelen tener la misma curva de luminosidad y son muy útiles en astronomía. Al conocer un brillo de referencia y compararlo con la luz que medimos en la Tierra podemos conocer con gran precisión su distancia, lo que a su vez permite saber cuan lejos están otras galaxias.
Cuando la luz de la supernova es distorsionada por una lente gravitacional ofrecen la posibilidad de estudiar no solo la galaxia distante, sino también el cúmulo masivo que genera la deformación. Es posible conocer su distribución de masa y apoyar el estudio de la materia oscura.
Dado que el cúmulo no es homogéneo, la luz de la galaxia distante va por diferentes caminos para llegar a la Tierra. En estos mismos cambios puede encontrar cambios en la distancia que debe recorrer, provocando un desfase temporal entre cada imagen creada. Con los datos actuales se estima una demora de 1320 días entre la más antigua y la más reciente. Solo en la primera se puede ver la luz de la supernova.
Empleando los instrumentos del James Webb NIRCam y NIRSpec se midió el brillo y se extrajo espectroscopia de la supernova. Esto con el fin de compararla con los datos obtenidos de sucesos similares en el universo cercano. Permitiendo poner a prueba nuestros modelos actuales y verificar que si representan la realidad.