Lanzamiento con éxito de la sonda KPLO a la Luna por un Falcon 9

Despega con éxito la segunda misión con destino a la Luna del año. Esta sonda, llamada Danuri, de diseño y fabricación surcoreana llegará al satélite natural de la Tierra en diciembre.

A la 1:08 de la madrugada hora española, el cielo de la costa espacial se iluminaba gracias a los nueve motores Merlin 1D, que propulsan la primera etapa del Falcon 9. El cohete de SpaceX ha realizado un vuelo perfecto como acostumbra la compañía de Elon Musk.

Tras varios minutos de combustión, el propulsor de la primera etapa se ha separado correctamente permitiendo a la segunda etapa y al satélite continuar su camino. Tras esta correcta separación, la primera etapa ha logrado un aterrizaje perfecto sobre la barcaza Just Read The Instructions. Tras completar esta, su sexta misión aparentemente el próximo lanzamiento de esta será en un Falcon Heavy.

Tras esta separación, la segunda etapa finalmente ha liberado la nueva sonda en una órbita de transferencia hacia el punto L1. Esta trayectoria permite a la sonda ahorrar mucho combustible a costa, como es norma en el vuelo espacial, de tardar mucho más tiempo.

Por poner en perspectiva las cosas, las misiones Apollo tardaban aproximadamente tres días en llegar a la Luna.

La sonda

La sonda es bastante simple, pero realmente cuenta con un instrumento extremadamente potente. La ShadowCam es una versión modificada de la misma cámara que lleva la LRO. Estas modificaciones están pensadas para literalmente, ver en la oscuridad.

Hay muchas regiones de la Luna (proporcionalmente hablando, no en términos absolutos) que están en sombra permanente, esto es, recibe luz del Sol apenas unos días al año. En algunos casos ni eso, esto posibilita que puedan almacenarse hielos en estas zonas.

Si logramos encontrar estos escurridizos hielos, que sabemos que debería haber porque es lo que dicen los datos. Podremos no solo dar de beber a los astronautas, ahorrando una enorme cantidad de masa y dinero en envíos a la luna. Si no posibilitar una exploración tripulada a largo plazo de la Luna.

En resumen, esta es una sonda más de las muchas que van a volar en los próximos años a la Luna, pero con la diferencia de llevar un gran instrumento como es la ShadowCam. Nos permitirá no solo estudiar los hielos lunares si no averiguar más sobre la geología de estos lugares y preparar mejor la vuelta del ser humano a la Luna.