El portal EarthSky señala que dicho fenómeno estuvo acompañado de dos características que hicieron posible la observación de este acontecimiento. Primero, procede de una región del Sol que acaba de empezar a girar, lo que contribuye a la investigación. En segundo lugar, muestra una configuración gamma. Se trata de una configuración compleja y potencialmente activa, «por lo que podemos esperar que esta región siga produciendo fuertes llamadas», afirman expertos citados en EarthSky.