Para medir la profundidad de la Torca del Porrón, se usó un láser para unir puntos en la cavidad y medir la distancia, el rumbo y la inclinación desde ellos. Luego, con estos datos, el software de una computadora fue responsable de dibujar la forma de la cavidad y mostrar su profundidad. Hasta su descubrimiento, la Torca de los Pasiegos, que se comunica con la Torca del Porrón en su base conocida como ‘Sala Maldita’, era el pozo más profundo de España con 345 metros.
Ahora este es el pozo más profundo de España y uno de los más grandes del mundo. Los espeleólogos esperan seguir descubriendo cavidades porque en esa área, a 450 metros sobre el nivel del mar, el macizo está «plagado de galerías gigantes». Para hacer esto, esperarán las condiciones climáticas externas que dificultan la mejora del trabajo de exploración, y uno de los objetivos será ingresar a la grieta antes mencionada en la que se origina una gran cascada en días lluviosos «para ver si da acceso a otros pozos «