A pocos meses de celebrar ocho años de su llegada a Júpiter la sonda Juno ha permitido redescubrir mundos explorados previamente por Voyager, Galileo y Cassini. El pasado 3 de febrero realizó el segundo gran sobrevuelo a la luna Ío, el mundo geológicamente más activo del sistema solar. Rozando los 1500 kilómetros de altura ofrece nuevas fotografías con una resolución sin precedentes.
Segunda mirada de JunoCam
La sonda Juno lleva los últimos meses acercándose cada vez más a Ío, ofreciendo progresivamente mejor resolución de su superficie hasta los pasados sobrevuelos del 30 de diciembre y 3 de febrero. A pesar del notable deterioro de la cámara por la intensa radiación de Júpiter, la sonda sigue ofreciendo nuevas imágenes para comprender mejor los misterios de la volcánica luna.
Spit take time. Juno's highest resolution image of Io (prominent features include Shamshu Patera, Hi'iaka Montes, and Janus Patera) pic.twitter.com/Xz43PTrUSh
Junto con las fotografías tomadas por el instrumento JunoCam y JIRAM y los otros instrumentos a bordo, se busca conocer mejor sobre el comportamiento interno de Ío, la dinámica interna y la posibilidad de que contenga un océano de magma interno.
Ío es además hogar de varios volcanes y cordilleras con una altura semejante o incluso superior a la del monte Everest.
En los próximos meses, Juno seguirá modificando su órbita progresivamente, alejándose cada vez más de Ío y acercándose a regiones diferentes de Júpiter.