Starship: el cohete más poderoso del mundo se despierta
La Starship está hoy un paso más cerca de ser todo lo que se ha prometido alrededor de ella.
En tan solo siete años desde su primera aproximación seria se ha logrado construir un primer cohete más o menos operativo.
Se lleva hablando mucho de un posible lanzamiento de un primer prototipo de Starship desde poco después de empezar el año. Elon Musk, decía que este podía producirse en febrero incluso, aunque seguramente sería marzo. Desde entonces se han sucedido las pruebas necesarias para este primer vuelo a órbita. Primero se aumentó el número de motores en cada prueba de fuego estático.
Luego se realizó un llenado completo de la Starship y el Super Heavy, algo que aún no había pasado con los propelentes de vuelo.
Y hoy, por fin, después de tanto tiempo y dinero de desarrollo, se ha producido un hito histórico al activar simultáneamente los 33 motores Raptor que propulsan el Super Heavy. Lamentablemente, uno de ellos no pudo activarse y durante la breve prueba otro más se apagó. Pese a ese desagradable incidente, la Starship está lista para su vuelo inaugural.
Y aunque el reto del lanzamiento se lleve todos los titulares, los motores Raptor no merecen menos.
En estos momentos es complicado discutir que estos propulsores sean los mejores del mundo. Su ciclo de propelentes, el full flow stage combustion, marca un antes y un después en el desarrollo de los motores cohetes.
Este ciclo hace una precombustión de los dos propelentes sin desperdiciar nada de ninguno de los dos. Esto mejora sustancialmente el rendimiento del motor en las dos métricas más importantes, impulso específico y empuje.
Además, marca un antes y un después en el uso del metano como combustible en cohetes. Aunque finalmente se le han adelantado otros vehículos, el Raptor siempre será recordado entre los entendidos como el que marcó el camino.
Sus capacidades son además portentosas, apoyándose en ese nuevo ciclo motor revolucionario. Este motor batió el récord de TWR (Thrust to Weight Ratio, relación peso potencia en inglés), que ya poseía SpaceX con sus motores Merlin 1D.
Otro récord que ha logrado batir es el de la presión en la cámara de combustión. Esta parte del motor es una de las más importantes, ya que es donde se terminan de mezclar los propelentes. Después, los gases aquí producidos son expulsados hacia la tobera generando el empuje.
El récord lo tenía el RD-180 soviético en una presión de 270 bares. Mientras que el nuevo Raptor eleva el récord hasta los 330 bares de forma sostenida. Aunque supuestamente el diseño podría aguantar aún más.
Después de esta prueba, igual que para cualquier otro cohete, se considera que es apto para volar. Es la última prueba antes de un lanzamiento, no hay forma de probar más cosas sin volar de verdad. Y por eso podemos afirmar, que siempre y cuando la prueba haya salido bien, algo que no sabremos hasta dentro de unos días, la Starship está lista para reunirse con su futuro. Los problemas en esos dos motores no parecen a primera vista demasiado graves y no deberían impedir un lanzamiento inminente.